Adrián Fernández, director ejecutivo de la organización Iniciativa Climática de México (ICM), indicó que México está muy comprometido con sus compromisos climáticos internacionales y en caso de no cumplir se quedara en un gran ridículo mundial, pero se tiene que trabajar  localmente para ir por el camino correcto en mitigación y adaptación de las emisiones contaminantes del país.

Detalló que un gran pendiente de los acuerdos de mitigación ambiental del país es considerar el papel de las ciudades y los estados, pues la labor ambiental no es sólo para un gobierno federal. “Tenemos ejemplos a nivel global de que no todo es la Federación, un caso es los Estados Unidos que en administración nacional pasada detuvo sus políticas ambientales, pero sus entidades avanzaron en sus políticas, como es California”.

En nuestro caso, el ICM tiene un sitio web que hemos dado a conocer a los 32 secretarios de Medio Ambiente estatales para que conozcan parte de la realidad climática de sus regiones, este sitio se cataloga como comunidad climática mexicana.

Por fortuna tenemos trabajos y contacto con los 32 secretarios estatales para acelerar en sus planes ambientales y vincular sus desafíos de desarrollo social y económico sin dañar sus ecosistemas y ser urbes sustentables”.

“Trabajamos en un planteamiento de los planes estatales climáticos en emisiones y adaptación local, para así formular sus metas locales condicionadas y no condicionadas. Además que pueden tener aspectos más ambiciosos que la propia Federación y poder avanzar en movilidad, aire, industria, etc., con visión verde. Siendo esencial que el gobierno nacional no descuide aspectos como la energía, dijo.

La importancia de la implementación de acciones, políticas, etc., que se deben establecer es un aspecto que requiere de ser impulsado de forma inmediata. Esta organización dio a conocer un documento de 88 medidas para que México pueda llegar a las metas de mitigación del 30 por ciento de emisiones gases de efecto invernadero (GEIs) para 2030, de manera no condicionada y, hasta 47 por ciento de manera condicionada (con financiamiento internacional), para cumplir los compromisos del Acuerdo de París.

En el caso de los trabajos de sustentabilidad que Querétaro realiza y han sido reconocidos por diversas organizaciones se tiene el tema forestal, que el Forest Stewardship Council (FSC), indica que el Estado si bien no es una potencia forestal, sus nichos boscosos como es la Sierra Gorda le hacen ser una entidad clave a nivel nacional para establecerse como una región de conservación de biodiversidad de las especies de fauna y flora.

Mientras que un estudio con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), México tiene cuatro urbes reconocidas como ciudades inteligentes, siendo Querétaro una de ellas con su proyecto en Maderas.

En residuos, Querétaro se genera 2 mil 85 toneladas diarias de desechos, de las cuales se recolectan en promedio mil 867, es decir,  89.5 por ciento, (a nivel nacional, la entidad ocupa el sitio 12 de los Estados que menos residuos generan).

La Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) indica que entidades como Querétaro y sus vecinos del bajío nacional, deben no sólo consolidar su crecimiento económico e industrial sino el ambiental, pues no debe olvidarse que para un verdadero crecimiento sostenible se requiere de tener una biodiversidad y ecosistemas saludables sin un impacto irreversible por la mano del hombre.

La entidad cuenta con proyectos magnos como el Programa de Manejo de la Reserva de la Biosfera Sierra Gorda, Querétaro, la implementación de un mecanismo de pago por Servicios Ambientales a través de fondos concurrentes.

En el caso de la realidad ambiental de Querétaro se puede mencionar que produce 12 millones de toneladas de CO2, principal gas de efecto invernadero, y es ocasionado principalmente por la industria, suministro de energía, el transporte y la gestión de residuos, informó la Secretaría de Desarrollo Sustentable en el Estado.

Igualmente, se tiene que mencionar que Querétaro, es una de las 8 entidades del país que han establecido un impuesto al carbono, con el cual se tiene en miras que 286 empresas inscritas permita recabar unos 300 millones de pesos en 2023. Dicha normativa se estableció junto con Zacatecas, Tamaulipas, Baja California, Yucatán, Estado de México y Guanajuato, impuesto estatal se implementa ante la lentitud del actuar de la Federación.

Al cierre del 2022, el gobernador Mauricio Kuri González declaró que la entidad ha consolidado la Fase I del Sistema de Economía Circular, que atiende los grandes retos del estado que son: seguridad, economía, agua, energía, mejora regulatoria y movilidad.

Aunado a la autorización de proyectos con impacto estatal de protección ambiental como es la definición del Sello Estatal de Bajas Emisiones de Carbono.

De acuerdo a las estimaciones de la Fundación internacional ICM en el documento presentando a la COP-27 de Egipto, México estará entre los 10 mayores emisores del mundo a partir de mediados de esta década. Hasta el día de hoy, es el único de los países integrantes del G-20 que no ha presentado un plan de largo plazo para ser cero emisiones a mediados de este siglo.

Se considera que es urgente que México reduzca sus vulnerabilidades climáticas e incrementé su resiliencia, porque el 68 por ciento de su población 885 millones de personas) son altamente vulnerables a daños climáticos. Aproximadamente un 50 por ciento de los municipios del país son altamente vulnerables al Cambio Climático.

Adrián Fernández menciona que en energía renovable es esencial que en México se retomen las nuevas subastas energéticas renovables y destrabar los proyectos verdes que no se dejan conectar a la red nacional, así como financiar y expandir la red de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), aunado a tener un programa de energía solar distribuida con el programa “hogar solar”.

El análisis de cada medida tiene que ser técnica y científica para establecer una transición climática con aspectos muy específicos en energía, deforestación, justicia social y ambiental, para que estas medidas contribuyan a atender las inequidades y pobreza social, así como con visión de perspectiva de género.

Aceptó que “estamos atrasados en el país en muchos aspectos como son financiamiento y otras políticas o información científica. México se comprometió a reducir un 30 por ciento los gases de efecto invernadero (GEIs) al 2030, para alcanzar dicha meta se requiere invertir 105,640 millones de dólares en los próximos 8 años. Es decir, alrededor de 13,205 millones de dólares al año”.

Pero se tiene que reconocer que las pérdidas y daños exigen actuar prontamente. También se debe dar seguimiento permanente a las medidas costo efectivas del país es tener una nueva norma oficial de uso de combustible, pero la Secretaría de Medio Ambiente federal (Semarnat) publicará un documento realizado por la industria automotriz que no servirá de nada. El sector privado que pide subsidios de hasta 50 mil pesos por unidad móvil, aspecto que hace que impongan las normas que les beneficia en todo momento, denunció.

Igualmente, se trabaja en la implementación inmediata de acciones climáticas para cumplir los compromisos de mitigar el 35 por ciento de las emisiones del país que se anunciaron en la pasada COP-27 en Egipto.

En el caso de la Secretaría de Medio Ambiente federal (Semarnat) y las acciones energéticas del país se tienen apuestas a favor de los combustibles fósiles, adundó que se busca diálogo con ellos y si bien somos incomodos para ellos; pero no tenemos problemas de platicar con dicha dependencia federal.

“Tenemos coincidencias con la Federación para mitigar emisiones, pero se tienen otras discordancias, esa una realidad que existen algunas “voladas” del gobierno, pero se requiere no sólo decir tal o cual estimación sino que falta información científica real sobre cómo llegar a las metas anunciadas para el 2030 y 2050”.

Más ahora que la Federación se comprometió a bajar sus emisiones y dichos acuerdos del país desemboca en que dependencias como la Secretaría de Energía feeral tengan abiertas sus puertas para definir los cómos sobre cumplir los compromisos nacionales en Cambio Climático. “Debemos elevar el nivel del diálogo y no mantener el golpeteo en niveles ideológicos, se tiene que hablar con información con base científica”, acotó.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *