En el panorama global actual, donde los consumidores y empleados prestan mayor atención en la ética y las prácticas empresariales, el acceso igualitario en las organizaciones se suma como una verdadera ventaja competitiva. De acuerdo con la encuesta más reciente realizada en el 2020 por McKinsey & Company, las empresas dirigidas por líderes que promueven la integración de talento diverso tienen un 35% más de probabilidad de superar a sus competidores en cuanto a rentabilidad.

Por otro lado, estadísticas del 2024 de Diversidad e Inclusión Laboral en México (ADIL), señalan que 60% de las personas de la comunidad LGBT+ y 44% del personal con un cargo directivo o de liderazgo, no revela su orientación o identidad de género en su trabajo por temor a sufrir algún tipo de represalia o discriminación. Lo anterior limita el bienestar emocional y la calidad de vida de los trabajadores, por lo que su potencial profesional también se ve afectado.

Estas cifras, aunque pueden parecer desalentadoras, permiten visualizar las ventajas e importancia de promover la pluralidad de perfiles en las empresas. Ejemplo de ello, son aquellas que han sumado esfuerzos para asegurar la salud integral de sus colaboradores a través de acciones que impulsan entornos justos y equitativos, que dan como resultado una clima organizacional positivo y fortalecen el sentido de pertenencia de manera uniforme.

Reconocimientos con impacto real

La promesa de sostener espacios que respetan los derechos humanos y el bienestar labora es reconocido por diversos organismos. Distintivo como ESR, es otorgado por el Centro Mexicano para la Filantropía (Cemefi) a empresas socialmente responsables y que cuentan con iniciativas para mejorar la calidad de vida de sus trabajadores. Así como la certificación de Great Place To Work, una de las distinciones más deseadas por muchos centros de trabajo porque los reconoce de manera nacional e internacional y los vuelve más atractivos en la atracción y retención de talento.

Otro de los certificados a mencionar es el HRC Equidad MX, el cual valida las políticas de inclusión LGBTIQ+ y posiciona a los centros de trabajo como un lugar confiable, seguro y, sobre todo, de respeto para la comunidad. En este mismo ámbito, existe el Gran Acuerdo por el Trato Igualitario CDMX, una iniciativa del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación (COPRED) que busca promover la igualdad, la no discriminación y garantizar el acceso pleno a los derechos de las personas.

 

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