Los problemas gastrointestinales en México, como la úlcera péptica, son de las primeras causas de consulta, cuyo origen se encuentra en la infección por Helicobacter pylori (H. pylori), que afecta a siete de cada 10 personas en el país. Una vez que se detecta la infección debe tratarse con antibióticos y, al mismo tiempo, es recomendable que durante y después del tratamiento se utilicen probióticos o, mejor aún, simbióticos.
Los simbióticos son productos que combinan probióticos y prebióticos con el objetivo de mejorar la salud intestinal de forma integral. Los probióticos son microorganismos vivos que, al ser ingeridos en cantidades adecuadas, aportan beneficios al equilibrio de la microbiota intestinal, mientras que los prebióticos son tipos de fibra que no se digieren, pero que sirven de alimento para estos microorganismos. Al actuar juntos, los simbióticos favorecen la supervivencia, colonización y actividad de los probióticos en el intestino, lo que contribuye a mejorar la digestión, fortalecer el sistema inmunológico y prevenir trastornos gastrointestinales 3. Esta sinergia los convierte en una herramienta eficaz para mantener o restablecer un ambiente intestinal saludable.
El Helicobacter pylori es una bacteria que infecta el estómago y está relacionada con problemas como gastritis crónica, úlceras y, en algunos casos (alrededor del 1%), con un mayor riesgo de cáncer gástrico.
Síntomas de infección por Helicobacter pylori
El primer paso para detectar la infección por esta bacteria, que se adquiere por contacto directo con saliva de otra persona infectada, alimentos o agua contaminada, es consultar al médico si se presentan estos síntomas:
Dolor o ardor en el estómago
Náuseas
Dolor agudo con el estómago vacío
Falta de apetito
Hinchazón
Eructos frecuentes
Si bien el tratamiento incluye antibióticos que actúan en sinergia para erradicar la infección, el uso de suplementos simbióticos.
Además, esta bacteria es la principal causante de úlceras estomacales también conocidas como úlceras pépticas, que se caracterizan por la pérdida de la mucosa natural del estómago.
Algunos de los factores que agravan la infección por H. pylori son el consumo de alcohol, tabaquismo, estrés y el consumo de antiinflamatorios no esteroideos como ibuprofeno y ácido acetilsalicílico.
El tratamiento más efectivo contra H. pylori incluye antibióticos y simbióticos
Para eliminar esta bacteria, una opción efectiva es el uso de antibióticos de primera línea, los cuales se administran en esquemas conocidos como triple terapia o cuádruple terapia.
La triple terapia combina un protector gástrico con dos antibióticos.
La cuádruple terapia incluye un antibiótico adicional o sales de bismuto para reforzar el tratamiento.
Estas combinaciones tienen un efecto más potente cuando se usan juntas, lo que las convierte en las principales estrategias para erradicar H. pylori. La elección entre una u otra depende del caso de cada paciente y de la respuesta al tratamiento.
“Durante un tratamiento de antibióticos contra Helicobacter pylori, los simbióticos ayudan a proteger el estómago para prevenir efectos secundarios, asegurando que los pacientes no tengan molestias y den continuidad al combate de la infección. Incluso, el consumo de simbióticos mejora la salud general al fortalecer el sistema inmunológico”, comentó, el Dr. Zeniff Gómez Arcive, Médico CirujanoMantener la salud gastrointestinal es fundamental para el desempeño óptimo del cuerpo. Además de combatir los problemas que provoca H. pylori, la dupla de antibióticos y simbióticos proporcionó una tasa de erradicación significativa del 91%, de acuerdo con análisis de Medix, farmacéutica mexicana con especialidad en protección gastrointestinal. .