Mayo es sinónimo de reconocimiento a las madres mexicanas. Pero más allá de las flores, los homenajes y las postales emotivas, hay una realidad cotidiana que atraviesa millones de hogares en el país: las madres de familia que conducen cada día para cumplir con su rol como cuidadoras, proveedoras y responsables de la movilidad de sus hijos.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 87.6% de las mujeres con hijos menores de edad son las principales responsables de su cuidado, lo que incluye sus traslados diarios hacia la escuela, acompañarlos a clases extracurriculares, consultas médicas, entre otros.
En capitales como la Ciudad de México, es común observar los congestionamientos vehiculares durante los horarios escolares; de hecho, TomTom Index destaca al horario entre las 07:00 y las 09:00 como uno de los de mayor tráfico, caracterizado por un alto flujo de autos con menores a bordo.
Este contexto vial, explica Zurich México, provoca que cuando las madres de familia encienden el auto y se ponen al volante, estén constantemente expuestas a los riesgos del entorno urbano, como colisiones, frenadas súbitas o accidentes ocasionados por terceros. Cuando hay niñas o niños en el vehículo, estos incidentes adquieren otra dimensión: la salud y seguridad de los menores se convierten en la prioridad inmediata.
¿Qué cobertura especializada responde a esa necesidad?
Por lo anterior, Zurich México destaca la relevancia de contar con una cobertura extendida que responda directamente a esta realidad. Un ejemplo es Gastos Médicos Ilimitados para menores de 12 años, diseñada para proteger la integridad de niñas y niños que viajan como ocupantes en vehículos asegurados conducidos por madres (o padres) de familia.
Esta cobertura se activa en caso de accidente automovilístico y cubre, sin deducible, todos los gastos médicos derivados del evento: tratamientos, intervenciones quirúrgicas, hospitalización o servicios de ambulancia, siempre que el menor haya resultado afectado directamente y sea atendido dentro de los 90 días siguientes al siniestro.
Su principal ventaja es que opera en exceso de la cobertura tradicional de Gastos Médicos a Ocupantes; es decir, no reemplaza a la cobertura médica que ya viene incluida en el seguro, sino que la complementa. Esto permite ampliar el respaldo incluso si los gastos de la atención al menor rebasan el límite de la póliza convencional. Además, la cobertura permanece activa hasta que el menor recibe el alta médica definitiva, sin interrupciones ni topes definidos por evento. Esto representa una garantía de continuidad médica que reduce la carga emocional y económica.
La movilidad familiar en México está llena de retos poco visibles pero constantes: el cruce intempestivo de peatones, las fallas en semáforos, los baches que obligan a frenadas bruscas, o incluso los impactos en cadena en horas pico. Ninguna madre de familia al volante planea un accidente, pero todas buscan proteger a sus hijos si algo sucede.
En un país donde millones de mujeres conducen cada día con el cuidado de sus hijos como prioridad, la existencia de una cobertura enfocada específicamente en los menores de edad se convierte en un factor clave al momento de elegir una póliza. Contar con coberturas que responden a esa realidad específica es más que una ventaja técnica: es una herramienta de tranquilidad.