La presidenta Claudia Sheinbaum calificó como bueno que el Congreso de Estados Unidos disminuyó del 5 al 3.5 por ciento el nuevo impuesto para las remesas que se propuso recientemente y por el cual el Senado de la República envió una comitiva a Washington D.C. para evitar el avance de la iniciativa.
Dijo que su gobierno continuará dialogando con los senadores estadunidenses, tanto republicanos como demócratas, para exponer las razones por las que el impuesto ocasionará afectaciones a la economía de ambas naciones.
“Vamos a seguir hablando ahora con los senadores republicanos y demócratas, de los dos partidos, explicando por qué no es bueno que haya un impuesto a las remesas en el país”, dijo.
Expuso que la reducción de aranceles que se consiguió, es importante para México, hay países de Centroamérica que las remesas representan el 20 por ciento del Producto Interno Bruto, en nuestro caso es alrededor del 3 por ciento es importante para todos los países, incluso para India”.
La Presidenta invitó a los paisanos a enviar cartas a los senadores estadounidenses para exhortarlos a no aprobar que se impongan aumentos a las remesas que envían extranjeros desde Estados Unidos.
Resaltó que “México es el único que hemos estado hablando con congresistas, haciendo nuestro trabajo, con organizaciones en Estados Unidos, los paisanos estuvieron enviando cartas, correos electrónicos, posteando en las redes y vamos a seguir trabajando sobre este tema para que no haya ningún impuesto.